sábado, 6 de diciembre de 2008

Inexorablemente tuya...




El tiempo transcurre inexorable,

me pueblas toda de besos

-de norte a sur-

y me gusta tu imagen presentida

cada vez que requiero tu presencia.



Cae del cielo

lluvia a cántaros de pétalos de girasoles

y te atoras en mi garganta,

dulce néctar de duraznos frescos



Quedo extasiada

y un suspiro intenso

llega presagiando el final

(esa causa nuestra de seguir solitarios

para no presionar)



No me angustio...

nuevamente volverás a buscar víctimas estúpidas

que regodeen tu ego

mientras yo, dejaré la puerta entreabierta.



Estarás al acecho

porque amas el instante de quedarnos satisfechos...



Es la oportunidad única de ser libres

en nuestra propia dictadura.

2 comentarios:

Navegante dijo...

Que lindo, otro espacio vacío que llenaré con mucho gusto.
¡¡Basta!! Si aquello es inevitable cerrá la puerta de una vez y salí por la ventana hacia otro campo soleado.
Chauickkkkk

@ngelluz dijo...

Sí, basta ya!!!
pero es como un vicio, a lo mejor lo hace porque sabe que siempre encontrará la puerta entre abierta.

Debo seguir, sé que debeo seguir mi vida sin nada que me ate.

Besos super super dulces muuuuuuuuuuuuuuuuuak...